Está claramente demostrado que los “Goteros y Otilios,
chapuzas a domicilio” existen también fuera de nuestras fronteras.
Mirar si no a Tim Cannon que ha querido iniciarse como
biohacker Cyborg mediante un implante de motorización biométrica.
¡Vaya implante, bonito y disimulado! Una perfecta
modificación corporal voluntaria (no como marcapasos y demás).
Un utilísimo e imprescindible biochip (tamaño familiar) que transfiere
a un dispositivo Android por Bluetooth la temperatura corporal.
¡Con lo fácil que es ponerse el termómetro!
1 comentario:
¡COÑO, QUE ANGUNIA ME DA ESTA FOTO!
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